Se exige el Impuesto de Plusvalía Municipal a personas que han vendido inmuebles con pérdidas, y no se aplican a las donaciones con pacto sucesorio las bonificaciones establecidas para las herencias.

A pesar de la Sentencia del Tribunal Constitucional de 11/5/2017 y de varias Sentencias del Tribunal Supremo que consideran que no se puede exigir Plusvalía Municipal a las personas que venden sus inmuebles perdiendo dinero, el PP de Calviá denuncia que el Departamento de Plusvalías del Ayuntamiento les sigue exigiendo ese impuesto y no les permite presentar una autoliquidación negativa acreditando las pérdidas con escrituras de compra y de venta. Esas personas se ven obligadas a presentar la documentación por el registro municipal.

El PP de Calviá también denuncia que ese mismo Departamento indica a los ciudadanos que a las donaciones de inmuebles con pacto sucesorio (cada vez más habituales, normalmente a hijos que renuncian a legítima) no les resultan aplicables las bonificaciones de hasta el 95% en Plusvalía Municipal previstas para herencias por fallecimiento, ignorando una Consulta Vinculante de la Dirección General de Tributos que señala que sí resultan aplicables.

El PP de Calviá considera que se está llevando a engaño a muchos ciudadanos, que terminan pagando impuestos indebidos por importes elevados, incluso de muchos miles de euros.

Por otra parte, el PP de Calviá también está estudiando el masivo envío de notificaciones por el Ayuntamiento en pleno mes de agosto, exigiendo liquidaciones de IBI (Impuesto Bienes Inmuebles) de los ejercicios 2013, 2014, 2015 y 2016.

Se han exigido a ciudadanos a los que el Catastro regularizó inmuebles en 2016 por construcciones no declaradas (con incrementos de valores catastrales), pero sorprende que se les pueda exigir impuestos más allá de los últimos 4 años, que en 2019 se reclame el IBI del 2013 y del 2014.

Justamente las cuotas de tales años son las más elevadas porque los valores catastrales de los inmuebles de Calvià habían quedado muy elevados tras la última revisión catastral realizada en plena burbuja inmobiliaria. Se tuvieron que rebajar un 22% a partir de 2015.

El PP de Calviá tiene conocimiento de algunos casos en que las notificaciones del Catastro en 2016 no fueron correctas, por lo que el Ayuntamiento no podría ahora exigir IBI del 2013 y 2014.