El nuevo servicio de recogida selectiva de la basura orgánica comienza a operar en el municipio a partir de este viernes.

Este viernes 25 el Ayuntamiento de Andratx pone en marcha, mediante su departamento de Medio Ambiente, una nueva fracción dentro de su sistema de recogida selectiva. Se trata de la materia orgánica, una recogida de residuos puramente biodegradables y que a partir de este fin llevarán a cabo los comercios que se han adherido este año al Programa de Inspección Técnica de Residuos.

Actualmente, una parte muy importante de los residuos que se generan y que van a parar a los vertederos está constituida por materia orgánica, y su separación a partir de ahora puede suponer "un ahorro importante para las arcas municipales gracias a la reducción en el coste de la quema de residuos", según afirma Estefanía Gonzalvo, regidora de Economía y de Medio Ambiente. Gonzalvo ha señalado además el importante beneficio que tiene en el ámbito medioambiental,  ya que "la materia orgánica es perfectamente útil para la generación de biogás y compostaje".

Un objetivo más del departamento en su afán por mejorar el sistema de recogida en el municipio, ya sea a título individual o para los comercios locales, pero que, como destaca Gonzalvo, "requiere también de la voluntad ciudadana". En ese sentido, además de la distribución de los nuevos contenedores a los comercios, recientemente se han llevado a cabo tareas de formación para quienes quieran llevar a cabo este tipo de reciclaje, porque "el reto para los ciudadanos no consiste sólo en reciclar, sino también en saber cómo hacerlo".

¿Qué se tira en el contenedor marrón?

El nuevo contenedor para la recogida orgánica será de color marrón, y en él se deberá tirar todo lo que se termine convirtiendo en biogás o en fertilizante. Hablamos, por tanto, de restos de comida o alimentos, ya sean cocinados o no; comida de animales; los posos de café, resto de infusiones y bolsitas de té; pequeños restos de jardinería como plantas, hojas, ramos de flores o tallos; servilletas de papel usadas o manchadas de aceite o comida; tapones de corcho, cerrillas, palillos.

La inserción de este nuevo sistema de recogida no significa que desaparezca el contenedor de RSU de toda la vida. En él deberá tirarse todo aquello que no se pueda tirar en el resto de cubos: papel y cartón, vidrio, envases, u orgánica. Es decir: colillas, chicles, los excrementos de animales,  el papel manchado de residuos químicos o de limpieza, toallitas húmedas, pañales, compresas y tampones.